Mezclote

Bueno. En vista de que llevo unas semanas sin publicar, lo que voy a hacer es resumir aquí todo aquello digno de mención que haya ocurrido durante ese tiempo.
Primero: las famosas convivencias
-Han sido las primeras a las que voy como catequista (y no como catecúmeno), y la verdad es que tiene sus ventajas...sólo el hecho de saber que cuando mandas algo, los chavales DEBEN obedecerte, mola. Una anécdota interesante es que, a partir del segundo día, absolutamente todos los demás monitores se sabían ya los nombres de todos y cada uno de mis chavales. Era frecuente oírlos en frases como "¡¡Martín, ¿quieres dejar eso de una vez?!!","Pablo, deja de decir chorradas", "Miguel, vuelve a enroscar bien la tapa del salero", etc. etc. etc.
-Éramos once monitores. Diez personas roncaban. Ha sido alucinante comprobar (en medio de una larga noche en vela, intentando sin éxito dormir un minuto seguido) cómo una cosa tan simple como los ronquidos puede originar un concierto soberbio, con cánones a cinco voces que se elevan, caen y vuelven a elevarse en un crescendo espectacular que parece hecho a propósito. Lástima no haber tenido a mano una grabadora, porque lo habría colgado aquí y sabríais a qué me refiero. (ODIO compartir habitación con mucha gente).
-Los chavales me vacilaban incrédulos cuando les decía que utilizaría la gaita para despertarlos la mañana del tercer día. El que avisa no es traidor. Cuando, con malvado placer, cumplí mi promesa, contemplando con despiadadas sonrisas cómo saltaban de la cama con gritos de pavor a las 8:30 de la mañana después de cinco horas y media de sueño, no tuvieron más remedio que creerme. Otro dato curioso: las opiniones de los organizadores de la conspiración y las de las víctimas de la misma acerca de mis dotes musicales eran muuuuuuy distintas. (Je, je, je, pequeños monstruos, ahora sabéis cómo se siente uno con la escandalera que armáis en las reuniones...)
Segundo: la primera comunión de Marta
No es que haya ocurrido nada especialmente jocoso o raro (aparte de unas venerables ancianas de la comunión de otro niño con las que coincidimos en el banquete y que se dedicaron a cantar en un karaoke, estando a punto de provocar varios suicidios), pero tenía ganas de comentarlo (Marta estaba muy contenta, qué maja...)
Tercero: se ciernen sobre nosotros...
En seguida tenemos ya exámenes...en una época como ésta, en la que el tiempo está tan bien, todo es felicidad y alegría, los días son tan largos y uno debería pasarlos en la pisci y con sus amigos...a currar. ¿¡¡Por quééééééééé!!?
Cuarto: piragüismo en el río Duratón
Eso ha sido este domingo pasado, remando bajo los magníficos cortados en compañía de los buitres...alucinante. Lo recomiendo a todo el mundo. Genial. (Y, a pesar de que soy una persona propensa a provocar catástrofes y que tenía todos los ingredientes necesarios para ello -a saber: la piragua, el río y mi hermana Amalia, con quien compartía la embarcación-, no hubo ahogados ni heridos, que conste).

Esta foto la sacó Amalia desde la barquita...

Quinto: filetes corredores
En la comida de hace unos días, cuando fui a servirle el filete a Marta, nadie aceptó mi teoría de que el maligno trozo de carne había desarrollado pseudópodos y se quería ir a vivir su vida: la culpa de que el filete saliese volando del plato y acabara en las fauces de Athos fue (según mi familia) mía y sólo mía.
Y sexto...nuevas y viejas frases célebres
La primera la dijo nuestra profe de Histología, cuando hubo que abordar el tema de los tejidos vegetales, dejando muy claro cuánto le fascinan las magníficas plantas que pueblan nuestro planeta:
"Las plantas, eso verde y marrón que hay por el campo..."
Esta otra la dijo hace tiempo una amiga mía llamada Tamara, dando a entender que no estaba de acuerdo con el personaje que le había tocado ser en un juego. Fuera de contexto, es una frase muy curiosa:
"¡¡¡Estoy harta de ser mujer!!!"
Y esta otra (y con esto me despido) me la dijo hace ya cinco años mi profe de Matemáticas de 2º E.S.O., como diciéndome que la pregunta que le acababa de responder estaba MAL respondida:
"Tienes suerte de que la fiebre aftosa no afecte a los burros..."